Maputo - El Gobierno de Mozambique y la Comunidad de Desarrollo de África Austral (SADC) evaluarán hoy (martes) en una cumbre en Pretoria, Sudáfrica, la misión militar conjunta para combatir la insurgencia en Cabo Delgado, anunció la presidencia en Maputo.
El Presidente mozambiqueño, Filipe Nyusi, participa en la cumbre extraordinaria del Órgano de la Troika de la SADC, extendida a Mozambique y países contribuyentes con personal en la misión en Mozambique (SAMIM, sus siglas en inglés).
La cumbre "considerará el informe de avance de las operaciones de SAMIM desde su despliegue en julio de 2021 y deliberará sobre las acciones futuras, en el marco de los esfuerzos en curso para combatir el terrorismo en la provincia de Cabo Delgado", se lee en un comunicado de la presidencia.
La Troika de órganos de cooperación en materia de política, defensa y seguridad de la SADC está presidida por Sudáfrica y sus vicepresidentes son Namibia y Botsuana.
Nyusi estará acompañado por el ministro de Interior, Amade Miquidade, y el viceministro de Asuntos Exteriores y Cooperación, Manuel Gonçalves.
Desde Julio, una ofensiva de las tropas gubernamentales con el apoyo de Ruanda, a la que luego se unió la SADC, ha aumentado la seguridad, recuperando varias áreas de Cabo Delgado donde había rebeldes, a saber, la ciudad de Mocímboa da Praia, que estaba ocupada desde Agosto. 2020.
SAMIM anunció que estaba en pleno funcionamiento a partir del 3 de septiembre.
Uniendo fuerzas de diferentes países, la misión cumple un mandato de seis puntos centrado en apoyar al Estado de Mozambique para asegurar la provincia de Cabo Delgado y brindar apoyo de entrenamiento aéreo, marítimo, logístico y militar, recuerda el comunicado.
El mandato también incluye el apoyo a las operaciones humanitarias.
La provincia de Cabo Delgado es rica en gas natural, pero aterrorizada por rebeldes armados, con algunos ataques reivindicados por el grupo extremista Estado Islámico.
El conflicto ya ha causado más de 3.100 muertes, según el proyecto de registro de conflictos de la ACLED, y más de 817.000 personas desplazadas, según las autoridades de Mozambique.