Nueva York - El número de víctimas del tráfico de humano en África subsahariana disminuyó ligeramente un 12 por ciento entre 2019 y 2020, según el Informe mundial sobre la trata de personas de las Naciones Unidas, para 2022 y publicado hoy.
Según el documento, elaborado por la Oficina de las Naciones Unidas contra la Droga y el Delito (UNODC), los niños siguen representando la mayoría de las víctimas detectadas y si a ellos se suman las mujeres, el total de víctimas de estos dos grupos poblacionales traficados en sub- África sahariana es el 62 por ciento.
“Entre 2019 y 2020, la tasa de víctimas infantiles por cada 1.000.000 de habitantes aumentó un 43 por ciento”, sin embargo, detalla el informe, “se detectan menos víctimas por cada 100.000 habitantes que en otras partes del mundo”.
"Si bien la explotación sexual históricamente ha sido una forma de explotación en otras regiones con una mayoría de víctimas mujeres, el trabajo forzoso sigue siendo la forma más común del tráfico detectado en África subsahariana, particularmente en los países de África oriental, donde la trata para trabajo forzoso representó el 80 por ciento de la forma de explotación para el total de víctimas registradas en 2020”, señala el informe.
En comparación con otras regiones de tráfico transfronterizo, las víctimas de África subsahariana se detectan en un número cada vez mayor de países, tanto dentro como fuera de la región de origen.
Según el informe, el 85 por ciento de las víctimas detectadas en 2020 fueron traficadas a nivel nacional y, en situaciones en las que se detectaron víctimas extranjeras, la mayoría fueron traficadas dentro de la región desde otros países del África subsahariana, en particular de países del este y sur de África.