Kinshasa - El Gobierno de la República Democrática del Congo (RDC) anunció este martes el fin del último brote de Ébola en el país, pero advirtió del riesgo de nuevos contagios por la reciente aparición de otro brote en Uganda.
“Debemos fortalecer aún más nuestro sistema de vigilancia epidemiológica, así como seguir reflexionando sobre las estrategias a implementar en las áreas de riesgo”, dijo el Ministro de Salud de la RDC, Jean Jacques Mbungani.
El brote de Ébola en la RDC, declarado el 22 de agosto en Beni, ciudad del noreste del país, en la provincia de Kivu del Norte, es el decimoquinto que se registra en el país y ha causado solo una muerte.
"La República Democrática del Congo ha acumulado una experiencia impresionante en el control de este virus y podemos utilizar las lecciones aprendidas para contener el brote de Ébola en Uganda", dijo Matshidiso Moeti, directora de la Organización Mundial de la Salud (OMS) para el continente africano.
Según la OMS, tras el anuncio del brote en Uganda, las autoridades sanitarias del país vacunaron rápidamente a más de 500 personas, incluidas 350 contactadas por personas infectadas, así como a trabajadores sanitarios con funciones de primera línea en la lucha contra el virus.
Las autoridades sanitarias de Uganda también monitorearon a 182 pacientes que habían estado en contacto directo e indirecto con una víctima mortal del virus durante 21 días, y los dieron de alta después de confirmar que no habían contraído la enfermedad.
Desde el anuncio del nuevo brote de Ébola en Uganda, el día 20, el Ministerio de Salud del país ha registrado 18 casos confirmados de infección por el virus y cinco muertes.
El brote de esta enfermedad en la República Democrática del Congo fue de la cepa Zaire, y el brote en Uganda es de una cepa mucho menos común, la de Sudán.
A diferencia de la cepa Zaire, no existe una vacuna aprobada para la cepa Sudán, que es menos transmisible y tiene una mortalidad menor (40-100%) que la anterior (70-100%).
"Aunque todavía no existe una vacuna efectiva para la cepa del virus de Sudán, (...) podemos y hemos controlado los brotes de Ébola con un fuerte rastreo de contactos, detección, aislamiento de casos y buena atención médica", dijo Moeti.
La OMS destacó que Uganda tiene una buena capacidad para realizar pruebas de Ébola y que las autoridades ugandesas ya identificaron y están monitoreando la situación de cerca de 400 personas que han tenido contacto con personas infectadas.
Descubierto en 1976 en la República Democrática del Congo, entonces llamada Zaire, el Ébola es una enfermedad grave, a menudo mortal, que afecta a humanos y otros primates y se transmite por contacto directo con la sangre y los fluidos corporales de personas o animales infectados.
Causa sangrado severo y sus primeros síntomas son fiebre alta repentina, debilidad severa y dolor muscular, de cabeza y de garganta, así como vómitos.
El virus asoló varios países de África Occidental entre 2014 y 2016, tiempo durante el cual murieron 11.300 personas y se registraron más de 28.500 casos.
