Londres - La Amnistía Internacional (AI) alertó hoy sobre el retroceso de los derechos humanos en Túnez después que el Presidente Kais Said asumió plenos poderes el 25 de este mes (Julio), fecha para cuyo aniversario marcó un referendo constitucional.
“Al dictaminar por decreto, sin control ni supervisión, el presidente comprometió varios avances decisivos en materia de derechos humanos que el país había garantizado en los diez años posteriores a la revolución de 2011”, denunció Heba Morayef, directora regional de AI para Oriente Medio y Norte África.
En un informe, la Organización No Gubernamental (ONG) de Derechos Humanos indica que las autoridades tunecinas, “a pesar de no aplicar una represión a gran escala, están atacando a los más destacados críticos y considerados enemigos del presidente”.
AI destacó 50 prohibiciones de viaje impuestas arbitrariamente a jueces, funcionarios, empresarios y diputados, un mes después de que el presidente se arrogara plenos poderes, y desde junio, otras tres prohibiciones arbitrarias de viaje a por lo menos tres diputados del Parlamento disuelto.
Los juicios de civiles ante tribunales militares también aumentaron significativamente e involucraron por lo menos a 12 personas, agregó AI, antes de recordar una escalada en diciembre último con las detenciones, sin cargos ni acceso a abogados, de un ex ministro de justicia y exjefe de los servicios de seguridad.
AI también advirtió que el texto constitucional que se votará en referéndum el próximo lunes, coincidiendo con el aniversario del estado de emergencia, "reforzará aún más sus competencias y amenazará aún más los derechos humanos".