Malanje- El escultor angoleño de artes africanas António Maria Júnior, defendió hoy, miércoles, la creación de escuelas de artes artesanales en el país, en el sentido de estimular la adhesión de adolescentes y jóvenes al mundo artístico cultural.
Expresó que las artes necesitan más apoyo y valorización, lo que requiere de la mano del Estado y de la clase empresarial, ya que sin este podrían extinguirse con el tiempo, teniendo en cuenta que muchos artistas ya se han dado por vencidos por falta de incentivos.
Dijo que aunque hay muchos artesanos, no tiene conocimiento de la existencia de ninguna escuela pública oficial de artes culturales en el país, lo cual sería bueno para el desarrollo de las artes africanas, destacando que ha iniciado contactos con algunos gobiernos provinciales, con el fin de apoyar esta causa, pero sin éxito.
En declaraciones a la Angop sobre el estado actual de las artes, el artista dijo que la escultura y otras áreas culturales son devaluadas en el país, a pesar de los repetidos reclamos y llamamientos, y agregó que la valorización implica inicialmente sensibilizar a las personas sobre la necesidad de adherirse a los eventos culturales y luego pasar a los actos.
“La apreciación de las artes es baja, se necesita más. La gente ve la artesanía como un trabajo mezquino de personas atrasadas, que no lo es”, lamentó, y agregó que el arte identifica a un pueblo, representa la cultura, pero se valora más la extranjería y las nuevas tecnologías.
El artista opina que el reconocimiento y estímulo de los artesanos por parte del Estado y otros organismos afines implica la realización de charlas, congresos y otros eventos de sensibilización destinados a la difusión de obras escultóricas, exhibición de obras, premios, entre otras medidas.
Dijo, por otra parte, que había solicitado la semana pasada, con la Administración Municipal de Malanje, la materialización de un proyecto destinado a capacitar a niños y adolescentes en la creación de esculturas, para el cual está a la espera de aprobación.
Destacó que después de tres meses de formación, ya es posible que los pasantes comiencen a desarrollar y crear esculturas.
Agregó que muchos jóvenes de Malanje se han ofrecido para embarcarse en esta área de la cultura, pero sin la intervención de los órganos gubernamentales no será posible por la insuficiencia de recursos combinados con otros factores.
Recordó que para la ejecución del arte las principales herramientas son esencialmente la destreza y el gusto, seguidas de la madera, la piedra, la pintura y otras materias primas, condiciones a las que tiene acceso cualquier individuo.
Lamentó el hecho de que las piezas más costosas que representan aspectos culturales de Angola y de África son en su mayoría adquiridas por extranjeros y transportadas fuera del país.
Con 75 años, António Maria Júnior ingresó al mundo de la escultura hace sesenta años y dijo que siempre defendió que la falta de adhesión tiene que ver con la falta de cultura.
Nacido en la provincia de Zaire y residente en Luanda, António Maria Júnior entró en el mundo del arte a los 15 años, influenciado por un familiar.
Una de sus obras más valiosas (Pé de Candeeiro, moldeado), estimada en dos millones de kwanzas, fue vendida en Luanda y llevada a Sudáfrica.
