Luanda – Angola registró de Enero a Octubre, de este año, 14.950 muertes y 2.607 heridos en la secuencia de 12.069 accidentes de tránsito, en una tendencia creciente “que a todos debe preocupar y llanar a la reflexión”, alertó, este sábado, la Vicepresidenta de la República, Esperança Costa.
“Como órgano consultivo del Presidente de la República, en materia de tránsito y planificación del tránsito a nivel nacional, observamos con gran preocupación que el año 2023 continúa proyectándose en una trayectoria negativa en materia de accidentes”, escribe en un mensaje, al que la Angop tuvo acceso, con motivo del Día Mundial del Recuerdo de las Víctimas del Tránsito, que se celebra el domingo.
Ante la situación, afirma la vicepresidenta, es prioridad del Ejecutivo trabajar para la reducción de la siniestralidad vial, con base en el Plan Nacional de Ordenación Vial y del Tráfico 2023-2027, así como la intervención continua en señalización, rehabilitación, construcción de infraestructuras y aumento de Capacidad técnica para la inspección de tránsito.
“¡Es posible hacer más y mejor en nombre de la seguridad vial y la consiguiente preservación de la vida! Es urgente, por tanto, devolver la tan deseada seguridad vial en las carreteras angoleñas. Sin embargo, para llegar allí es crucial la acción conjunta de todas las fuerzas de la nación, con énfasis en la familia, la comunidad, la escuela, la sociedad civil, la academia, la iglesia, etc”, afirma.
Desde esta perspectiva, Esperança Costa entiende que es fundamental sumar esfuerzos y actuar juntos para revertir la situación actual, marcada por altos índices de accidentes, muertes, mutilaciones y daños materiales, lo que demuestra cuánto necesitamos reflexionar sobre el cambio de rumbo y de colectivo. reto que es necesario afrontar para alcanzar la deseable paz y seguridad en la carretera.
Según la vicepresidenta, el lema de este año “Tráfico seguro, vidas salvadas” es un llamamiento que se adapta a las necesidades de los tiempos que vivimos, ya que recomienda a cada uno de nosotros la prudencia necesaria para contrarrestar la tendencia creciente de los accidentes, un auténtico flagelo que sigue representando un grave problema de salud pública a escala mundial.
El mundo celebra, el 19 de noviembre, el Día Mundial de Recuerdo a las Víctimas del Tránsito, fecha establecida por la Asamblea General de las Naciones Unidas en 2005, como una forma de alentar a los gobiernos a tomar medidas efectivas para abordar la urgente necesidad de contener los accidentes en las carreteras, que afectan a todo el tejido social, enluta y empobrece a las familias.
