Ramiros - Los turistas nacionales y extranjeros que visitan el Miradouro da Lua, ubicado en la comuna de Barra de Cuanza, municipio de Belas, en Luanda, sugieren cobrar peajes para acceder al sitio y para el mantenimiento del mismo.
Tres años después de su remodelación, el Miradouro da Lua, que en su día fue uno de los escenarios de proyección de películas de autores nacionales y extranjeros, sigue teniendo una gran afluencia de turistas.
El lugar es, inequívocamente, una parada turística obligada para quien se dirige desde Luanda a Barra de Cuanza o a las playas de Cabo Ledo.
Hasta principios de 2019, el sitio se encontraba muy degradado y abandonado, debido a las quebradas que lo rodeaban, la falta de infraestructura turística y la gran cantidad de basura y escombros domésticos que allí se depositaban.
Actualmente, el escenario es diferente y bastante cómodo. Se estancaron los barrancos y se instalaron infraestructuras en madera trabajada en el sitio, áreas circulares de protección, donde, sin peligro, el turista puede observar el paisaje.
También se instaló en el solar un puesto de información, aparcamiento, quiosco, observatorio periférico, baños, pavimento asfáltico y grava en una superficie ejecutada de 16,78 metros cuadrados.
Durante un reportaje realizado por la ANGOP sobre el Miradouro da Lua, João de Carvalho, un turista de nacionalidad portuguesa, que visitaba por primera vez el lugar, camino de Cabo Ledo, consideró el paisaje fascinante y con infraestructura adecuada.
El interlocutor consideró que el hecho de que el lugar cuente con un paisaje deslumbrante y una infraestructura adecuada es justificación suficiente para cobrar tarifas de acceso.
“En lugares turísticos como este, existe una necesidad urgente de recaudar ingresos para la promoción y el desarrollo externo. Algo que incluso sostiene algunos vacíos a nivel local”, argumentó el turista.
Por su parte, su compatriota Armindo Emanuel, que vive en Angola desde hace más de cinco años, dijo que, para él, el Miradouro es un lugar imperdible, para tomar fotos y disfrutar de la vista de la naturaleza.
“La rehabilitación del lugar estuvo bien hecha”, subrayó el turista, refiriendo que el turismo puede ser una de las áreas de excelencia para la diversificación de la economía angoleña, por ser un sector en el que el país tiene un enorme potencial.
A su juicio, los centros turísticos deben contar como el trabajo desarrollado de manera tripartita entre el Estado, las entidades privadas y las comunidades locales.
La turista cubana, Regla Mercedez, enfatizó que para que exista turismo en Angola "deben darse condiciones de inversión, como se hizo en el Miradouro da Lua".
Consideró que se han construido pequeñas infraestructuras físicamente adecuadas y de fácil movilidad y cercanas a las localidades.
“Angola tiene numerosos atractivos turísticos, entre los que se destacan los parques nacionales de Kissama e Iona, Quedas de Calandula, Ruacaná, Mussulo, Miradouro da Lua, el río Zambezi”, citó el turista.
Ya el ciudadano angoleño, Jonas Albino, que visitaba el lugar frente a un grupo de 30 niños y jóvenes, sostuvo que para dotar de infraestructura e incentivar el turismo, es necesario partir de los ingresos de la actividad turística para su desarrollo y promoción internacional y para resolver otros problemas locales.
El Miradouro da Lua es un conjunto de acantilados ubicado a 40 kilómetros al sur de Luanda, en el municipio de Belas, en Angola. Con el tiempo, la erosión causada por el viento y la lluvia creó el paisaje lunar que se puede ver en el sitio.