Ondjiva - El mal estado de los caminos de acceso y la débil inversión privada son los principales impedimentos para explorar los recursos turísticos de las cascadas de Ruacaná, en el municipio de Curoca, provincia de Cunene.
Las Cascadas de Ruacaná son un conjunto de cascadas formadas por el río Cunene, en la frontera entre Angola y Namibia, su caída principal tiene unos 120 metros de altura y en tiempo de lluvia el agua se extiende por un espacio de 700 metros.
Para permitir la explotación de los recursos y lugares de interés de Ruacaná, el administrador municipal de Curoca, Manuel Domingos Taby, dijo hoy a la Angop que es necesario reparar los caminos de acceso para permitir su uso y garantizar mayores ingresos.
Según el administrador, es imperativo rehabilitar las vías de acceso a ese espacio y construir nuevas atracciones en el lugar.
Refirió que, actualmente, quienes se benefician de esa riqueza encontrada en Angola son los ciudadanos de la República de Namibia, que tiene caminos, alojamientos y otras condiciones creadas para la recepción de turistas de diferentes nacionalidades que ingresan por el territorio vecino.
Destacó que Curoca es rica en recursos turísticos que bien aprovechados pueden dinamizar el sector y diversificar la economía nacional.
En ese sentido, resaltó la necesidad de que el Gobierno angoleño invierta en este “monstruo” dormido, ya que los turistas que pasan quedan completamente asombrados y cuestionan la razón de no explotar este recurso.
“Han venido apareciendo turistas, tanto nacionales como extranjeros, que buscan conocer el funcionamiento de los saltos de agua de Ruacaná y otros puntos, pero hay una necesidad de hacer más atractivo ese lugar”, explicó el administrador.
Agregó que es necesario establecer políticas para el desarrollo del sector turístico, en especial de los puntos turísticos fronterizos, pues es una postal para muchos extranjeros.
Además de las cascadas del río Cunene, argumentó, Curoca tiene la represa hidroeléctrica Ruacaná, así como las cascadas de Monte Negro, la montaña Pedra Branca y las cuevas de Curoca como atractivos turísticos que esperan ser explorados.
Asimismo, resaltó la disponibilidad de recursos minerales en gran escala en la región, los cuales necesitan ser aprovechados en beneficio del desarrollo del municipio y el bienestar de la población local, actualmente considerada la más pobre del país.
“Curoca es un municipio virgen y tiene recursos minerales que están latentes y susceptibles de ser explotados, pero realmente necesitamos vías de acceso para que los empresarios vengan a invertir”, dijo.
El administrador invita, en ese sentido, a la clase empresarial del ramo a competir por la exploración de los sitios ya ubicados para una mejor explotación.
Cataratas de Ruacaná
Las Cataratas de Ruacaná son consideradas una de las cascadas más grandes de África, cuyo curso se utiliza para la producción de energía y el riego de campos agrícolas.
Las cascadas solo ofrecen su majestuosa apariencia durante la temporada de lluvias, pero su impresionante espectáculo convierte al lugar en un atractivo destino turístico.
La belleza de Ruacaná compitió por las siete maravillas de Angola, siendo una de las 27 finalistas entre las 200 candidaturas presentadas en 2013.
Con el montante se construyó la represa de Ruacaná que, junto con la represa de Calueque, alimenta una central hidroeléctrica construida por la República de Sudáfrica en la década de 1970, y un sistema de abastecimiento de agua, que sirve al norte de Namibia.